Desde siempre los humanos nos hemos reunido alrededor de un fuego a danzar. Círculo alrededor de un centro, espíritu que anima y transforma. Con este movimiento expresamos desde nuestro cuerpo lo más esencial de nuestro ser, la íntima relación entre conciencia y esta forma sagrada del círculo, la espiral que nos constituye.
Te invito a que te unas, a que tomes tu lugar en este círculo, para que al danzar junt@s tejamos hilos entre nuestros corazones y llevemos gracia y amor a nuestra vida y a la vida que nos rodea.
Virginia.